Growth hacking son técnicas de crecimiento acelerado que buscan una gran conversión a bajo precio y de forma muy rápida.
En definitiva, un método de growth hacking es empleado por equipos de marketing para aplicar una acción “de guerrilla” a corto plazo, aumentar la exposición de una marca y hacer crecer sus seguidores o compradores.
Los growth hackers combinan conceptos tácticos de marketing con características potenciales del producto que están tratando. Las estrategias de marketing que se desarrollan son diferentes dependiendo del sector en el que trabajes y de las características que posea tu cliente potencial.
En algunos casos prácticos se ha observado que en una tienda online eliminar los botones de “Retirar producto” y “Vaciar cesta” y dejar sólo el de “Completar compra” incrementó las ventas hasta un 55%.
Otros botones problemáticos en ecommerce son los de compartir página en redes sociales. Normalmente no se utilizan, pero los compradores que ven “0 veces compartido” lo asocian a baja calidad de producto. Retirar esos botones supuso un aumento de las conversiones del 11,9% en Taloon.
Cada vez más compradores y usuarios online rechazan rellenar formularios de antemano para hacer una compra o ver qué gastos de envío tendrán. Ofrecer el registro sólo como algo opcional puede aumentar las ventas hasta un 45%, según User Interface Engineering.
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En tests A/B se ha demostrado que esconder un formulario de registro hasta que el usuario pulsa el botón de “Apuntarse” incrementa los registros hasta un 60%.
En tests A/B realizados sobre títulos descriptivos de producto, se ha observado que añadir palabras atractivas como “a precios bajos” puede llegar a convertir más que dejar una descripción simple, como “Zapatillas deportivas”.
Todos conocemos Airbnb, la web de alquiler de alojamientos para estancias cortas. Enseguida detectaron que los apartamentos con mejores imágenes tenían más reservas, y por tanto decidieron empezar a contratar a fotógrafos profesionales.
En ecommerce, las fotografías de producto tienen el mismo impacto, así como todo el contenido de producto, que debe adaptarse perfectamente a cualquier pantalla, tener una navegación intuitiva y datos completos y actualizados. Una solución de Product Information Management (PIM) es la herramienta secreta de los growth hackers en venta de productos.
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Como una corbata para asistir a una boda, es un consejo típico, pero funcional. Analiza a menudo las tendencias de keywords en Google sobre tus temas y aplícalas en tus textos online.
Estudia muy bien cómo hablan tus clientes potenciales y cuál es su estilo y tipo de humor. En algunos casos, el uso de lenguaje coloquial ha provocado más atención y popularidad, pero en otros casos el uso de palabrotas aumenta el tráfico pero reduce ventas y suscriptores.
Si limitas la suscripción para conseguir tu producto o la posibilidad de acceder a tu servicio se generará en el consumidor curiosidad y sensación de exclusividad.
Otra estrategia es que para poder comprar tu producto o servicio sea necesario recibir una invitación de otro cliente.
Un ejemplo de servicio que empleó esta estrategia y que fue un auténtico éxito es Dropbox. Ofrecía a los clientes más espacio donde almacenar sus documentos en la nube a cambio de recomendar su herramienta a sus contactos.
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Organizar competiciones online para sortear algún producto a cambio de datos de potenciales clientes, u ofrecer algún descuento a través de mailing o redes sociales, es una forma rápida de ampliar tu base de datos de clientes.
Nada hay más rápido y eficaz que ir adonde están tus clientes. Emplazar anuncios y contenidos especializados en webs y foros de tu nicho, que son consultados por los clientes potenciales que persigues, y contactar directamente a ese tipo de usuarios y organizaciones.
Por ejemplo, Crazy Egg sabía que sus clientes debían ser diseñadores web, de modo que invirtieron en ubicar anuncios en galerías de CSS y en subir sus diseños para conseguir más descargas y emails. Otra estrategia que aplicaron fue regalar cuentas gratuitas a blogs de tecnología para ganar atención, y lo consiguieron con grandes plataformas como TechCrunch y Mashable.
Dar a conocer tu marca en eventos especializados es una gran forma de ganar notoriedad. Como no siempre es fácil acceder a ellos y conllevan gastos por desplazamiento y tasas de conferenciante, una alternativa es ofrecerte como sponsor del evento.
→ ¡Un chollo! Cómo aprovechar sitios de rebajas online para vender más
Zapier es una plataforma que te permite conectar múltiples herramientas de growth hacking, análisis y marketing, para automatizar tus esfuerzos. La automatización en software es la gran tendencia de futuro para productos, pues permite ahorrar recursos y aumentar la productividad.
Esta extensión para el navegador Chrome te permite analizar búsquedas en Google y conocer la dificultad de palabras clave que emplees, sugerencias de alternativas, estadísticas y actividad de competidores.
Los mapas de calor están en boga porque son una herramienta fácil de instalar y de comprender. Hotjar te permite ver de forma visual dónde hacen clic los visitantes de tu web, hasta dónde leen en cada página y cuánto tiempo invierten en sus visitas.
Las notificaciones push están recuperando popularidad. Es una vía fácil para mostrar avisos a usuarios desde un navegador web o mensajes como Facebook Messenger. Mediante notificaciones puede dar a conocer nuevos productos y ofertas temporales. Además, VWO permite identificar y atraer visitantes perdidos de vuelta a tu tienda online o página web.
Hacer tests de diseño es clave en growth hacking para ecommerce, porque muchos compradores toman decisiones en apenas unos segundos. Busca opiniones de profesionales sobre tu interfaz y experiencia de compra mediante fáciles encuestas como las de UsabilityHub.
Si prefieres hacer pruebas sobre clientes reales, es clave emplear tests A/B con herramientas como Optimizely, que te permiten identificar qué alternativa está convirtiendo más.
Tal vez no puedas conseguir que todo sean compras desde el principio, pero sí ganar unos cuantos emails con los que generar una buena base de contactos. Emplazar banners en tu web puede atraer a más usuarios, y herramientas como Sumo facilitan incluirlos sin necesidad de programaciones complejas.
MixMax es una extensión para Gmail que te permite conocer quién ha recibido tus emails, quién los ha abierto, si han interactuado con algún enlace incluido o si han reenviado el correo a otra persona. Este conocimiento es clave para identificar con qué usuarios debes potenciar el contacto y cuáles son inactivos.
Poner las cosas fáciles al usuario es la puerta principal hacia un cliente fiel. Con herramientas como Userlane, crear un onboarding basado en pantallas fáciles de seguir, intuitivas y claras te permitirá explicar mejor a los compradores cómo usar tu web o servicio.
Al poco tiempo de lanzar la app, en Twitter detectaron que la gente se creaba un usuario, pero enseguida dejaba de utilizar la aplicación.
Llevaron a cabo numerosos tests con clientes potenciales y llegaron a la conclusión de que si ofrecían a los usuarios entre 5 y 10 cuentas que seguir cuando se introducían en el servicio, era más posible que su fidelidad al servicio aumentara. Es decir, si rápidamente aportas contenido de valor, la continuidad del comprador en la red está asegurada.
Desde el momento en el que te introduces en su plataforma, YouTube te ofrece muchísimas facilidades para compartir un vídeo en una red social, blog o página web.
Otra estrategia que llevaron a cabo es aplicar recomendaciones a partir de cada contenido. Es la misma técnica que aplica Spotify para mantener el tiempo de uso de la aplicación: el usuario tiene la opción de encadenar continuamente contenido nuevo basado en sus intereses.
En ecommerce, esta estrategia de growth marketing se aplica a las tácticas de cross-selling y upselling, que permiten al comprador descubrir productos relacionados o complementarios a aquél que está consultando.
Invertir en growth hacking requiere más ingenio y creatividad que recursos, de modo que es una estrategia que sin duda deberías probar.
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